|Por Guillermo Bañuelos|

-ISMUJERES, ¿ya?

El proceso electoral inició formalmente con la semana y correrá junto a una pandemia que causó ya la muerte de cerca de 70 mil mexicanos, una crisis económica de consecuencias aun incalculadas y un clima de polarización social en ascenso.

No termina el aciago 2020 e irrumpió en la escena un año eminentemente político y de ajustes de cuentas de todo tipo.

Cual Caja de Pandora, el nuevo periodo podría contener más males que remedios.
La esperanza de superar el encono y de restablecer el diálogo y una paz verdadera es, desgraciadamente, pobre, a menos de que en este país ocurra un despertar súbito y grandioso de conciencias que ponga fin a la discordia y a la venganza entre unos y otros.

Si la víspera anuncia cómo será el nuevo día, podemos prever que el 2021 llegue cargado de grandes sacudimientos políticos con efectos devastadores en la economía y en la política.

En un país democrático como el nuestro, fincado en leyes y estructuras institucionales sólidas, en tiempos ‘normales’ celebraríamos la vigencia del Estado de Derecho y, con el proceso electoral 2021, el inicio de un periodo productivo de debates y definiciones entre partidos y candidatos en el que el eje central sea el interés de los ciudadanos.
Pero algunos indicios muestran un proceso sobrecalentado prematuramente.

La descalificación y los golpes bajos entre unos y otros actores a través de las shit storm mediáticas así lo presagian.

Pareciera que es más fácil pedir peras al olmo que sensatez a todas las partes, desde el presidente de la república, los partidos los poderes fácticos y hasta a los ciudadanos, a quienes debemos garantizar el derecho constitucional de elegir a sus gobernantes con libertad plena mediante el ejercicio del voto secreto, sin coacciones, sin amenazas, sin miedo a perder su seguridad, su patrimonio o la simple beca que recibe y resuelve su necesidad más inmediata.
Parece que pedimos peras al olmo, pero, por el bien de todos, regálemonos una tregua.

Por la pandemia, ya son muchos los muertos; por esta lucha política sin fin, son muchos los golpes y cada vez más raquítica la esperanza de levantar este país.
Hagamos patria, ¿no?

LAURA GONZÁLEZ BON
El gobernador Quirino Ordaz Coppel presentó a los diputados una segunda propuesta para la elección de quien ocuparía la dirección del ISMUJERES.
Se trata de Laura del Carmen González Bon, comunicóloga, periodista y capacitadora reconocida en temas de Género y Derechos Humanos de las Mujeres. Sin duda, un perfil adecuado para dirigir el organismo.
Esperamos que los diputados realicen el trabajo que les corresponde y concluyan a la brevedad el proceso con la ratificación de Laura González.
Enhorabuena, compañera.