• Las obras como el Tren Maya o el aeropuerto se llevan buena parte del recurso cuando las prioridades deben ser la salud, la economía y la seguridad.

Culiacán, Sinaloa a 9 de septiembre de 2020.- El día de ayer se entregó el Paquete Económico 2021 a la Cámara de Diputados, y se puede ver claramente que es un proyecto ‘irresponsable’ e ‘insensible’, dijo Carlos Castaños Valenzuela.

El Diputado Federal panista asegura que los rubros abordados no son prioridad, pues no considera las verdaderas necesidades de las familias mexicanas.

«Se está presentando alto grado de endeudamiento interno específicamente en Pemex un endeudamiento del 120 por ciento, y en la CFE un endeudamiento interno del 10 por ciento», dijo Castaños Valenzuela.

“En rubros importantes como programas productivos tienen una disminución del 98 por ciento, además una disminución del presupuesto de la Secretaría del Trabajo específicamente programas de apoyo al empleo con una disminución de un 92 por ciento”, comentó el Diputado Federal.

Por todo ello, en el PAN propondremos disminuir el ISR, IVA y IEPS a gasolinas; y en el Presupuesto de Egresos privilegiar el gasto en aquello que es urgente para los mexicanos como la economía, la salud y la seguridad.

“No puede ser que la Secretaría de Hacienda, por atender los deseos del presidente, esté jugando con la economía familiar, no puede estar provocando una crisis más profunda. No basta con la retórica presidencial de la austeridad, se requiere un gobierno que dé resultados, que enfoque los recursos en lo más importante con medidas económicas anti cíclicas, que nos permitan superar esta muy difícil situación”, expresó Castaños Valenzuela.

El gobierno debe de dejar de tirar el dinero en sus elefantes blancos, pues se sabe que quiere aumentar 14 veces el gasto en Santa Lucía, de mil 901 millones a 27 mil 574 millones, y en el Tren Maya pretenden aumentar 10 veces el despilfarro, de 2 mil 580 millones a 26 mil 730 millones.

En Acción Nacional hay propuestas concretas y responsables frente a la amenaza de una recesión severa y un estancamiento prolongado, como el Ingreso Básico Universal en el que tanto hemos insistido y no descansaremos hasta verlo hecho realidad.