• El fideicomiso 2058 se planteó para impulsar la transición del ciudadano para tener acceso a las nuevas tecnologías informáticas

Julio de 2020.- Una nueva disyuntiva está en el gobierno federal, ya que la desaparición del fideicomiso conocido como e-México, podría desconectar a varios millones de mexicanos, dejándolos sin conexión a internet, abriendo aún más la brecha digital en el país.

Ya que, de acuerdo a información de Darío Celis en su columna dentro del diario El Financiero, el fideicomiso 2058, que ya no se encuentra en poder de la Secretaría de Comunicaciones y Transporte, afectaría a cerca de 12 millones de personas, sobre todo a población rural.

Este fideicomiso, avalado en 2002, durante el periodo de Vicente Fox,  tenía como objetivo desarrollar el Sistema Nacional e-México para que la mayor parte de la población pueda tener acceso a las nuevas tecnologías informáticas, lo cual involucra recursos públicos destinados por la Federación para la inversión, ejecución y  operación de los proyectos en materia de telecomunicaciones.

Toda esta acción llega después del decreto emitido el pasado 3 de abril de 2020 en el que se contempla la extinción o terminación de todos los fideicomisos públicos sin estructura orgánica, como es el caso de e-México, esto conforme el Informe sobre la situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública del primer trimestre de ese año.

El fideicomiso se construyó el 27 de julio de 2002 con una aportación inicial de 120 millones de pesos.

De acuerdo a la SCT, 11 millones, 584 mil 165 personas no cuentan en este momento con acceso a internet en México.

Este proyecto buscaba brindar redes de conectividad satelital a poblaciones de menos de 5 mil habitantes en el país, principalmente en escuelas, oficinas y centros de salud en 12 mil poblaciones.

En su último informe trimestral, López Obrador anunció que en el año 2022 el programa “Internet para Todos” conectará a una buena parte de las localidades.

Algunos de los fideicomisos que se extinguieron son: Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios, Sistema de Protección Social en Salud, Administración y Pago de Equipo Militar, Financiera Rural, Ley Aduanera, Desarrollo de Zonas de Producción Minera, e-México y Mejoramiento Urbano.

Este dinero, señaló el presidente López Obrador, llegaría a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para hacer frente a la emergencia sanitaria que se vive en el país por la pandemia del coronavirus, en abril.

Además se buscó fortalecer los programas sociales que se destinan a las personas de escasos recursos; a la reactivación económica (como los créditos que impulsen a la industria de la construcción para reactivar la economía). Otra parte se destinó a Petróleos Mexicanos (Pemex) ante la caída en los precios a nivel internacional. Y también al pago de la deuda externa.